Según publicó el 'Heraldo de Aragón' ayer, desde hace unos meses se ha puso en marcha el Proyecto Hera en el Hospital Miguel Servet de Zaragoza.
Este proyecto está dedicado a la atención a los bebés prematuros en su estancia hospitalaria.
Un niño prematuro es aquel que nace antes de las 37 semanas de gestación, y suele necesitar atención especializada de los servicios de neonatología. El por qué de esta atencion radica en la inmadurez de los sistemas y órganos, que no le permite tener una respiración adecuada, alimentación, etc.
Antiguamente, en los servicios de neonatologia, la atención a los bebés era más mecánica: el nene dentro de la incubadora, con las atenciones médicas propias, pero sin tener en cuentas sus necesidades especiales.
La evidencia científica ha mostrado dichas necesidades, y el Proyecto Hera, como grupo de trabajo, lo está extendiendo en España.
Uno de los cuidados es el llamado 'método canguro', para niños prematuros o no, y consiste algo tan intuitivo como el contacto piel con piel del bebé y sus padres. Esto favorece la eliminación del estrés del niño, una regulación del corazón, se favorece el reflejo de succión y también el sistema inmunitario, por nombrar algunas ventajas.
Además de esto, existen más ciudados centrados en el desarrollo, como favorecer una luz natural, eliminar los ruidos, instalación de cuñas y cojines que favorezcan la postura del niño...
Para más información, pueden visitar la página del proyecto.
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